Islander’s Dilemma

Desde la calma a la tempestad, el océano esconde un mundo de paralelismos con el jazz. Ambos despiertan diferentes emociones en el ser humano. Esa es la visión artística de Natanael Ramos, un isleño acostumbrado a divisar el mar en el horizonte. Con ella, Natanael nos sumerge en un océano de emociones a través de las culturas presentes en su tierra natal, Tenerife. Una de las ocho Islas Canarias y punto natural e histórico de conexión entre Europa, África y América. Usando el legado melódico y rítmico de sus ancestros, cocina un repertorio ecléctico con el que nos invita a sobrevolar el mar de nubes, caminar por la volcánica arena negra de sus playas o sentir el embate de las olas contra los acantilados. A través del sonido de su trompeta profundiza en el alma de cada historia que nos cuenta. Un sonido a veces cálido e introspectivo y otras salvaje y desbordante. Como el océano.

Islander’s Dilemma es el reflejo de un isleño errante. Isleño de muchos lugares y errante de cada uno de ellos. De un artista que se ahoga en la tierra y respira, aliviado, en el mar. Ese mar que le ata, a veces con sueños y otras veces con cadenas. De ese ermitaño en la soledad de su isla y prófugo de ella. Islander’s Dilemma es el eco de sus vivencias y andares por cada uno de esos lugares, imaginarios y reales. El reflejo de una piedra tallada por diferentes mares, a veces gota a gota, a veces por embates.